La fruta deshidratada es un verdadero tesoro culinario: concentra los sabores y azúcares naturales de la fruta fresca, ofrece una textura única y está repleta de nutrientes esenciales. 

Se trata de un ingrediente versátil que no solo es perfecto como snack directo de la bolsa, sino que también puede elevar tus postres a un nuevo nivel de sabor y salud. Al usar fruta deshidratada sin azúcares añadidos, puedes satisfacer tu gusto por lo dulce de una manera más nutritiva, aprovechando su fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes.

Si bien ya hemos explorado algunas formas de incorporar fruta deshidratada en ensaladas, desayunos y galletas en nuestro blog, hoy queremos proponerte tres ideas creativas y saludables para postres que van un poco más allá, además: ¡son fáciles de preparar y perfectas para disfrutar sin culpa!

Consejos rápidos antes de empezar:

• Si tu fruta deshidratada es muy seca, puedes remojarla en agua tibia por unos minutos para rehidratarla ligeramente antes de usarla, especialmente en rellenos o masas [similar idea a 149].
• Corta las piezas grandes de fruta deshidratada para distribuirlas mejor en tus preparaciones. Los rollitos de Bigu, por ejemplo, se pueden cortar fácilmente en pequeños trozos.
• Experimenta con diferentes tipos de fruta deshidratada según la receta: dátiles para dulzura y textura gomosa, arándanos o pasas para un toque ácido, damascos o higos para mayor fibra, mango o piña para un sabor tropical.

Receta 1: Bolitas energéticas con cacao

Inspiradas en la idea de snacks energéticos que combinan frutas secas y otros ingredientes saludables, estas bolitas son un postre rápido, nutritivo y delicioso que no requiere horno. Son perfectas para controlar los antojos de dulce y obtener un impulso de energía sostenida.

Ingredientes:.

1. 1 taza de la fruta deshidratada de tu preferencia, desde dátiles hasta cualquiera de nuestros rollitos Bigu.  
2. ½ taza de frutos secos (almendras, nueces, castañas de cajú)
3. ¼ taza de coco rallado deshidratado (y un poco más para cubrir)
4. 2 cucharadas de cacao amargo en polvo
5. 1 cucharada de mantequilla de maní o almendras (opcional, sirve para mezclar)
6. Una pizca de sal (opcional)

Preparación:

1. Si la fruta deshidratada a elección está muy dura, remojala en agua caliente por 5-10 minutos, luego escurrirla bien.
2. En un procesador de alimentos, combina la fruta deshidratada, frutos secos, coco rallado y cacao amargo.
3. Procesa hasta obtener una mezcla pegajosa que se pueda formar en bolitas. Si está muy seca, añade la mantequilla de maní o un chorrito de agua.
4. Forma bolitas pequeñas con las manos.
5. Pasa cada bolita por coco rallado adicional para cubrirlas.
6. Refrigera por al menos 30 minutos antes de servir para que tomen consistencia.

Estas bolitas son una excelente fuente de fibra, grasas saludables y carbohidratos complejos, ideales para mantener la energía y la saciedad. Y el cacao amargo añade antioxidantes. ¡Una verdadera delicia y puede ser una colación saludable ideal!

Receta 2: Manzanas horneadas rellenas 

Este es un postre cálido y reconfortante, perfecto para los días más fríos del año. Utiliza la dulzura natural de las manzanas y la fruta deshidratada, realzada por especias.

Ingredientes:

1. 2 manzanas grandes (variedad para hornear, como Fuji o Gala)
2. ¼ taza de mezcla de frutas deshidratadas picadas (pasas, arándanos, ciruelas, damascos)
3. 2 cucharadas de nueces picadas
4. 1 cucharadita de canela en polvo
5. ½ cucharadita de nuez moscada (opcional)
6. 1 cucharadita de miel o jarabe de maple (opcional)
7. Un chorrito de agua o jugo de manzana

Preparación:

1. Precalienta el horno a 190°C (375°F).
2. Lava bien las manzanas. Con un descorazonador o un cuchillo pequeño, retira el centro de cada manzana, dejando una base sólida para el relleno.
3. En un bol pequeño, mezcla las frutas deshidratadas picadas, las nueces, la canela y la nuez moscada. Si usas miel, agrégala aquí.
4. Rellena el hueco de cada manzana con esta mezcla, presionando ligeramente.
5. Coloca las manzanas rellenas en una bandeja pequeña para hornear.
6. Vierte un chorrito de agua o jugo de manzana en el fondo de la bandeja (esto ayuda a que se cocinen al vapor y no se sequen).
7. Hornea por 30-45 minutos, o hasta que las manzanas estén tiernas al pinchar con un tenedor. El tiempo puede variar según el tamaño, tipo de manzana y de horno.
8. Sirve tibias. Puedes añadir una cucharada de yogur natural o coco rallado por encima si lo deseas.

Las manzanas aportan fibra soluble, las frutas deshidratadas concentran dulzura natural y nutrientes, y las nueces añaden grasas saludables. Y de verdad, esta receta la recomendamos para los días de invierno. 

Receta 3: Semifrío de yogur 

Ingredientes:

1. 2 tazas de yogur natural espeso (griego o vegetal sin azúcar añadido)
2. ½ taza de fruta deshidratada variada, picada finamente (arándanos, cerezas, mango, Bigu rollitos cortados, lo que desees)
3. 2-3 cucharadas de miel, jarabe de maple o endulzante natural a gusto (ajustar según dulzura deseada y tipo de yogur)
4. 1 cucharadita de extracto de vainilla
5. Una pizca de ralladura de limón o naranja (opcional)

Preparación:

1. En un bol mediano, mezcla el yogur, la fruta deshidratada picada, el endulzante y el extracto de vainilla hasta que estén bien combinados. Si usas ralladura de cítricos, agrégala ahora.
2. Vierte la mezcla en moldes individuales o en un molde tipo budinera forrado con papel film para desmoldar fácilmente.
3. Cubre los moldes con papel film o tapa.
4. Congela por al menos 4-6 horas, o hasta que esté firme pero aún cremoso (no completamente sólido como un helado).
5. Para servir, puedes desmoldar si usaste un molde grande o servir directamente de los individuales. Decora con fruta fresca o un poco más de fruta deshidratada si lo deseas.

Este postre es una versión simplificada de un semifrío (del italiano semifreddo), utilizando yogur como base cremosa. Es refrescante, ligero y personalizable con tus frutas deshidratadas favoritas.

Estas recetas son solo un punto de partida. ¡La fruta deshidratada es tan versátil como tu imaginación